THE WALKING DEAD - 3x16 - “Bienvenidos a las tumbas”

En el capítulo anterior nos preguntamos qué pasaría con Andrea, ya que no volvimos a tener noticias tras la imagen que se dejó ver de ella esposada a una silla improvisada de tortura que hace las delicias del Gobernador. Llegamos pues al arranque de la esperada season finale. El Gobernador, que hoy debe haber desayunado lengua, se enorgullece aireando todas sus psicopatías antropológicas mientras golpea violentamente a Milton, su fiel lacayo convertido ahora en rebelde, y obligado a realizar un sucio trabajo: “Milton, te aseguro que no saldrás de esta habitación sin hacerlo”, matar a Andrea. En lugar de ello se abalanza sobre el Gobernador, pero es herido de muerte: “Te dije que ibas a hacerlo. Ahora vas a morir, te transformarás, y le arrancarás la carne de los huesos”. Comienza entonces una tensísima encrucijada en la habitación en la que Andrea sigue esposada a la silla y Milton a punto de convertirse en un caminante.

Tras el acto heroico de Merle, en la prisión han Ganado tiempo, pero tiempo para qué, ¿huír o luchar? Rick y Michone, en una escena llena de emoción contenida, contemplan a la par la admiración del uno por el otro y afianzan el comienzo de una relación que ya se antojaba necesaria, la de compañeros. Carl, por otro lado, se repliega sobe sí mismo cada vez más fruto del peso de todo lo vivido con una corta niñez: “Aún es un crío, a veces lo olvidamos”.

En Woodbury todo está preparado para asaltar la prisión y matar a todo bicho viviente (o no viviente). La llegada es todo un despliegue de armamento por parte del Gobernador y los suyos, llegando a tirar las torres de vigilancia a cañonazos. Se adentran en los patios; brazos, bazos y sesos de caminantes saltan como confetti en Nochevieja, y llegan a las celdas. Nadie. Vacío. Sólo una bilblia abierta reza con un versículo marcado en fluorescente sobre la mesa: “Y saldrán los que han hecho el bien para una resurrection de vida y los que han hecho el mal para una resurrección de juicio”. 
Andrea, a quien Milton dejó unos alicates tras la silla antes de ser apuñalado, lucha contra las ataduras para hecerse con la herramienta, mientras, Milton, lucha contra la pérdida ingente de sangre animando a Andrea a darse prisa antes de convertirse en un antropófago poco favorecedor y menos dicharachero. La tensión que produce la situación es infartante.
En el interior de los pasillos de las celdas algo anda merodeando. En medio del silencio una granada de humo, Rick y los demás siguen dentro, y tras los improvisados escudos consiguen a balazo limpio echar al gobernador y los demás de la carcel. Carl, que está fuera con Beth, Hershel y la niña, experimenta un acto que justificará ante su padre: la primera vez que mata a una persona viva, un jóven de Woodbury que accede a desarmarse. La razón de Carl: “Hice lo que tenía que hacer”.


Milton ya no responde, y Andrea casi ha logrado acercarse los alicates a la mano. Se suelta de una de las esposas, Milton gruñe. Andrea casi se ha soltado de ambas manos. Milton avazana. Se escuchan gritos.
El Gobernador ordena a los suyos volver a la prisión, pero ellos se niegan, así que este coge su arma y dispara contra todos mostrando al fin a su pueblo la clase de persona que es: un asesino sin escrúpulos. Rick, Michone y Daryl, de camino a Woodbury para acabar con El Gobernador, encuentran a los cadaveres siendo devorados por los ya transformados. Una mujer ha logrado sobrevivir, y les lleva a Woodbury, transmitiendo a los que se quedaron lo ocurrido. Son llevados a la habitación donde se encuentra Andrea. Al Abrir la puerta la situación muestra el cuerpo tirado de Milton inherte. Andrea, en suelo contra la pared, parece agotada, ha podido con él. No, no ha podido. Muestra su cuello y una gran mordedura atraviesa el craneo del espectador. Andrea solo cuenta con unos minutos hasta dejar de ser Andrea. Ella solo quería la paz, explica a Rick. Con Michone a su lado acabamos escuchando el cañon del arma que finalmente acaba con su vida. Andrea ha muerto.


Un coche, la moto de daryl y un autobus reforzado atraviesan los patios de la prisión. Los supervivientes de Woodbury se unen a Rick y el resto. La vision de Lory parece llegar a su fin, como un angel  que finalmente ha cumplido. Fin de la Tercera temporada.


Y ahora ¿qué se plantea en adelante? ¿la vuelta del Gobernador? ¿Un nuevo Woodbury en la prisión? Y Carl ¿dará lugar al principio de un personaje que ha madurado de la peor manera posible? Lo veremos en la siguiente temporada.

Por: Antonio Hachei